El romance es una expresión de la sexualidad y no tiene nada de malo en sí mismo. Activa el sistema de recompensa de la mente y el cuerpo, de modo que cuando lo piensas, genera un poco de “alta”, por lo que seguimos volviendo a él para obtener otro “golpe”.
El problema con esto es que cuando el proceso del deseo sexual suele ser autocontenido dentro del ciclo de las relaciones sexuales normales, las altas sexuales que están fuera de control como esta (el equivalente masculino es la pornografía), no tienen límites, es decir, no tienen límites. más piensas en ello más anhelas.
Pero donde la sexualidad normal es saludable, las fijaciones no son saludables. Está fuera de balance. Puede haber una razón para que el romance sea inusualmente cautivador para usted, como haber sido “sexualizado” a través del abuso sexual infantil (lo que hace que la sexualidad se desequilibre gravemente) o la autodisciplina poco desarrollada u otras causas.
Porque no hay un límite en el deseo sexual (cuanto más tienes, más quieres), por lo que la mejor manera de lidiar con él es contenerlo (aunque se necesita madurez para tomar esta decisión, como elegir esperar al segundo malvavisco ( vea wikipedia para la prueba de Marshmallow para una explicación de esto), pero obtener el control de nuestros deseos sexuales es una de las cosas que todos debemos hacer en la vida, por lo que estos deseos están contenidos en los momentos y lugares apropiados, y no en los tiempos y lugares equivocados. .
Aquí hay algunas ideas:
- Use esa energía caliente para hacer algo constructivo como limpiar la casa, el auto, la piscina, cualquier cosa que requiera esfuerzo físico.
- Usa esa energía caliente para hacer algo creativo como cantar o tocar un instrumento musical, escribir, hacer escultura.
- Salpica agua fría en tu cara. (Las lluvias frías se han demostrado al menos en una prueba para aumentar la testosterona, por lo que tendrá que juzgar los efectos que tiene sobre usted).
- Salga a caminar o haga otra actividad física.
- Bebe algo refrescante.
- Haga otras actividades que rompan la retención que tiene sobre usted.
Si intenta estas u otras actividades y todavía hay una compulsión por volver a las novelas románticas o si los sentimientos románticos dominan, entonces probablemente sería bueno consultar a un psicólogo para obtener más información.
¡Buena suerte!