Es difícil de decir. Primero tenemos que definir “ayuda”. Cualquier mejora con un trastorno de personalidad puede considerarse efectiva. Con suficiente frecuencia, supongo. Pero realmente se descompone en diferentes factores.
- Motivación del paciente para mejorar. Si un paciente tiene una buena razón para mejorar, ya sea manteniendo unida a su familia o matrimonio, reduciendo los problemas en el trabajo, evitando que los despidan, etc., esa puede ser una buena motivación para mantenerlos en terapia.
- La voluntad del paciente para trabajar. Incluso con la motivación adecuada, se necesita mucho, y me refiero a mucho, de trabajo para manejar un trastorno de la personalidad. Así que no solo tienen que estar dispuestos a obtener ayuda en primer lugar, sino que tienen que seguir trabajando en ello. Por lo general, la voluntad de seguir trabajando viene de un deseo de cambiar, si no es por los motivadores anteriores, por sí mismos.
- Tipo de terapia utilizada. DBT (Dialectical Behavior Therapy) es el tratamiento de primera línea para el trastorno de personalidad limítrofe, por ejemplo. Otros se benefician mejor de la terapia conductual cognitiva (TCC). La terapia debe adaptarse a lo que el cliente necesita, y el terapeuta debe conocer la aplicación de dicha terapia.
- Nivel de compromiso del paciente. Además de la motivación y la voluntad de trabajar, el paciente debe comprometerse a aplicar lo que aprenden en la terapia en su vida cotidiana.
- Nivel de experiencia del terapeuta. El terapeuta no solo tiene que conocer el tipo de terapia que administra, sino que también debe saber cómo funciona el trastorno de personalidad que está tratando. También tienen que mantenerse al día con la información y los estudios más recientes sobre qué tipo de terapia funciona mejor para qué trastorno de personalidad y cualquier cambio en la administración de esa terapia.
Estos cinco factores pueden tener un gran impacto en la eficacia de ayudar a las personas con trastornos de personalidad. Si el paciente está dispuesto a trabajar y el terapeuta sabe lo que está haciendo, entonces es posible que una persona con un trastorno de la personalidad progrese.