En el libro de Malcolm Gladwell, The Tipping Point, Gladwell habla sobre estudios que intentan identificar rasgos de personalidad (la psicología de uno) con su entorno y su genética. Lo que los investigadores descubrieron es que la genética y el medio ambiente juegan un papel de 50/50 en cómo se comporta una persona. El entorno no suele considerarse el clima físico en el que se encuentran, sino el estado de la vecindad de alguien, así como su grupo de iguales. Dado que hay muchos otros factores que intervienen en la psicología de uno, no creo que la cantidad de sol recibida desempeñe un papel importante en la forma en que alguien se comporta y piensa.
Sin embargo, usted dijo que estas personas tienen ciertos rasgos. Esto podría ser cierto debido a la disponibilidad de horas diurnas o días cálidos durante todo el año. Por ejemplo, alguien que vive en la costa es mucho más probable que sea un buceador que alguien en Illinois. Este es un ejemplo de cómo el clima puede afectar los pasatiempos, por lo tanto, tal vez afecte la forma en que pensamos. No obstante, no creo que la cantidad de sol se correlacionara bien con la psicología directa.