El crecimiento ocurre cuando exploramos nuestros límites.
El éxito es altamente subjetivo y dado que estamos cambiando constantemente en función de nuestras experiencias actuales, nuestra definición de éxito cambia con ello.
Cuando eres feliz o tienes éxito, encontramos algún tipo de equilibrio en nuestras vidas. Un espacio confortable donde hemos logrado lo que queríamos y podemos disfrutar. Esto deja poco espacio para el crecimiento.
Por otro lado, cuando fallamos, ya no estamos contentos de estar en nuestra zona segura. Estamos explorando nuestras propias limitaciones y áreas de nuestras vidas que queremos expandir.
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Esta área es donde experimentamos.
No necesariamente fallamos tanto como encontramos cosas que no funcionan para nosotros. Constantemente buscamos nuevas formas de mejorar nuestras vidas, ya sea financiera, amorosa, social, familiar o cualquier otra cosa.
A medida que encontramos cosas nuevas que nos vuelven a contentar, las etiquetamos como éxitos. Mejorando nuestras vidas a medida que cambia con cada nueva experiencia.