Aquí hay una respuesta práctica, estoica.
1. Ver la situación por lo que es.
El estoicismo aboga por una percepción clara y tranquila.
Entonces, si te resulta difícil resolver algo, o fallaste en una habilidad, etc., entonces date cuenta de que es eso y nada más.
- Confianza en sí mismo: ¿Dónde trazo la línea entre hacer las actividades “estándar” para aumentar mi atractivo (es decir, hacer ejercicio físico, vestirme bien, ser más asertivo) y sentirme cómodo al no ser perfecto?
- No tengo motivación para mejorar (mentalmente). ¿Qué tengo que hacer?
- Cómo conducir un coche más rápido
- ¿Puede un humano aumentar su capacidad para hacer algo o adquirir alguna habilidad que no tenía desde el nacimiento?
- Cómo gestionar tu productividad y hacer las cosas.
Fallar en una habilidad, o encontrar dificultades no significa que eres un completo fracaso. La etiqueta “fallo total” ya es un intento de colorear la situación con asociaciones externas. Olvídalo. Deténgase primero, y vea claramente.
Fracasaste en la habilidad. Estás encontrando algo difícil de entender.
Esa es toda la situación es. No se moleste innecesariamente agregando etiquetas o connotaciones. Solo aumentarás tu confusión de esa manera.
2. Ahora acepta la situación.
Los estoicos tienen una profunda confianza en el concepto de logos, visto como un destino o el principio de ordenamiento racional detrás de todo en el universo.
Y el estoicismo enseña que debes aprender a aceptar todos los eventos que suceden, ya que están diseñados para ti mediante logotipos. Entonces, después de que veas la situación puramente por lo que es, acéptalo.
Confíe en que esta experiencia, sin importar cuánta incomodidad cause, fue para usted. En palabras de Marco Aurelio, “la naturaleza lo tenía pensado para ti y tú para él”.
A partir de esta aceptación confiable, puede comenzar a ejercitar sus logotipos personales, es decir, su capacidad de razonar. Avanza al siguiente paso.
3. Usa tus logos para convertir el obstáculo en el camino.
Un descarado y absoluto agradecimiento a Ryan Holiday por este.
De todos modos, para los estoicos, los logotipos son tres cosas. La razón en sí misma, tu propia capacidad para la razón, y también la racionalidad que gobierna y ordena el universo.
Para este paso, utiliza los logotipos individuales dentro de ti.
Aplica la razón y piensa.
Estás encontrando algo difícil, etc.
¿Por qué? ¿Qué pasa con esta cosa o habilidad o tema te está tropezando? ¿Cómo puedes cambiar las cosas? ¿Qué es esta dificultad tratando de enseñarte? ¿Qué necesitas para hacer esto más fácil? Si le preguntas a alguien, etc.
Como puede ver, este es el paso final antes de la acción. Primero viste la situación por lo que era, luego la aceptaste. Ahora ha encontrado soluciones al problema y posibles lecciones para aprender.
El último paso es hacer.
4. Actuar de acuerdo a la razón.
Has deliberado, ¿y ahora qué?
Elija un curso de acción y asegúrese de que sea el más racional.
Entonces hacerlo. Eso es realmente todo lo que se puede hacer al final.
Nota
Cuando dijiste estoico, podrías haber querido decir el diccionario o la definición habitual, donde estoico generalmente significa apático y carente de emociones, pero como estoico, respondí como alguien que practica la filosofía en la vida cotidiana.