En la psicología freudiana, las fijaciones fálicas de la etapa no tienen mucho que ver con el placer sexual en sí. La etapa fálica termina mucho antes del inicio de la pubertad, cuando surgen los verdaderos impulsos sexuales, y tiene más que ver con la identidad, el género y el desarrollo egoico. Las personas con fijaciones fálicas en el escenario pueden ser dominantes o sumisas, vanas o modestas, excesivamente agresivas o demasiado pasivas …
Si sientes que no estás disfrutando del sexo, deberías consultar con un psicólogo. Un terapeuta del comportamiento podría ser más útil para un problema específico de este tipo que un psicólogo profundo, por lo que no hay necesidad de buscar un freudiano. Si de otra manera está bien adaptado, es decir, no tiene problemas para establecer o mantener relaciones, excepto que realmente no disfruta del sexo, hay consejeros y entrenadores que se especializan en la intimidad. Ellos pueden enseñarle cómo ponerse en contacto con su sexualidad interna. Recomiendo que no intente resolver este problema por su cuenta leyendo o navegando por Internet; Si actualmente tiene un compañero, debe incluirlo en la conversación con el terapeuta o entrenador, y si no lo hace, la orientación de un terapeuta o entrenador será aún más útil.