En teoría de juegos, no hay diferencia si solo hay dos o tres resultados posibles. Una vez que obtenga más de tres resultados posibles, estipulando que solo el mejor resultado es el ganador, habrá más jugadores que no pierdan que los que ganen. Así que no perder es un objetivo más fácil y un jugador tendrá una mayor tasa de éxito si su objetivo es no perder. Creo que puedes ver esta estrategia en competiciones de estilo de eliminación (piense en Survivor o Masterchef), donde no perder eventualmente implica ganar.
En última instancia, el contexto del juego, incluidos los pagos relativos, determinará qué estrategia es más efectiva. Considere el mercado de valores, por ejemplo. Si un profesional juega como un oso o un toro depende en parte de si el mercado está en una tendencia alcista o bajista. Esto se debe en parte a que la mayoría de los aficionados juegan con sus sentimientos y personalidades, ya sea que sean o no más agresivos o conservadores, y cómo reaccionan a ganar y perder. Las estrategias de otros jugadores se convierten en parte del contexto del juego. Pero si el pago es lo suficientemente alto, entonces algunas personas pueden capitalizar el temor de otros con operaciones audaces. Podría estar equivocado, pero creo que en Psicología, en general se acepta que tendemos a estar más motivados por el miedo (a perder) que al deseo (a ganar). Los mercadólogos utilizan esta psicología todo el tiempo para impulsar sus mensajes.
Otro contexto de juego a considerar sería el póker. Puedes entrenar una máquina para jugar al póquer con apuestas bajas con un pago bajo pero constante. Tomará la estrategia conservadora no perder. Debido a la forma en que se configura el póker, una estrategia de no perder casi siempre lo pondrá a uno incluso. Para obtener un pago, su máquina debe asumir riesgos. Tomar riesgos (ganar) es realmente difícil enseñar una máquina. El exitoso jugador de póker profesional, mientras que normalmente puede jugar para no perder, también es muy bueno para elegir su momento para cambiarlo todo (cambiar su estrategia en un momento para arriesgarse a ganar). Entonces, en el caso del póker, la misma estrategia no será la más efectiva incluso dentro del mismo juego.
Los ejemplos anteriores ilustran que la estrategia más efectiva es saber cuándo y dónde cambiar las estrategias. En general, no perder es más efectivo porque más personas no pueden perder que ganar, lo que facilita su obtención. Y en algunas condiciones, como los juegos de estilo de eliminación, no perder puede implicar ganar. Pero si buscas un pago decente en otros juegos como el mercado de valores o el póker, el momento en que tomes el riesgo para ganar será más efectivo. El truco es saber que la oportunidad dice que es el momento y el lugar apropiados para ir con todo y tener las agallas de arriesgarse a perder todo para capitalizar la oportunidad y ganar.