¿Cómo se originó el estereotipo ‘las rubias son tontas’?

La mejor teoría es:
Hay mujeres tontas e inteligentes de todos los colores de cabello. Sin embargo, las rubias se ven más a menudo como bonitas, jóvenes y atractivas. Su atractivo hace que otros pasen por alto cualquier error que cometan, o los perdona fácilmente, porque “ella es muy bonita, no seas tan dura con ella”. Esto, a su vez, permite que las rubias no se esfuercen demasiado cuando no saben algo o no tienen experiencia; saben que su apariencia a menudo las librará de muchas situaciones difíciles. Las morenas no necesariamente tienen ese lujo, por lo que no pueden relajarse y dejar que su apariencia haga el trabajo por ellas, en realidad necesitan trabajar en sus habilidades para evitar errores.

Lea todo esto como “a menudo”, “a veces”, “en muchos casos”, “con frecuencia” y otros similares sin generalizaciones drásticas. Sin embargo, incluso “a veces” podría haber sido suficiente para poner en marcha el estereotipo, una vez que se repitió suficientes veces para fijarse en la cultura.

Ajá, eso es genial. El estereotipo es en realidad real. Los asiáticos en mi escuela obtienen las mejores calificaciones, mientras que las rubias no lo hacen. Generalmente obtienen las marcas de fondo.

Probablemente se origina en las niñas del valle y la paternidad occidental. Los padres asiáticos tienden a adoptar un método de memoria, pero los padres occidentales dejan que sus hijos elijan por sí mismos y conduzcan al fracaso. Así que algunas rubias son vistas como tontas. No lo son, simplemente no saben las cosas que sus padres deberían haberles enseñado hace mucho tiempo.

Gran pregunta, pero no es una respuesta fácil.

El concepto puede haber estado dando vueltas por un tiempo, pero en 1925, Anita Loos escribió el best-seller Gentlemen Prefer Blondes , que lo lanzó al mundo en espera.

Y luego el maravilloso papel de Marilyn Monroe en la película de 1953 lo puso en piedra. (Hubo una película muda en 1928, que no lo hizo del todo). Monroe hizo suya la parte, y probablemente su papel en ” Some Like It Hot ” pasará a la historia como el retrato perfecto.

Vale la pena señalar que, a pesar de las apariencias, Monroe no era un “rubio rubio”; lejos de eso, sólo un gran actor.