¿Por qué nos limitamos a permanecer donde estamos, y no optamos por la grandeza?

Optar por ‘grande’ automáticamente nos obliga a salir de nuestra zona de confort, lo que la mayoría de nosotros no queremos. Es como el primer día de un principiante en la piscina. Estás al borde, perfectamente seguro y seco. Se podría pensar: “¿Por qué meterme en el agua solo por aprender a nadar? Nunca me ahogaré si evito el agua, ¿verdad?”

O, si eres del otro tipo, puedes saltar a él, comenzar a dominarlo y finalmente enamorarte de él.

En ambos casos, las circunstancias serán inevitables y es posible que se le exija nadar. Y si no lo haces pierdes. Un ser querido, tu propia vida, una competición o lo que sea.

Así es con la vida. La zona de confort es como el útero de una madre: es tu lugar seguro y feliz, pero más allá de un límite de tiempo, se supone que debes dejarlo y salir al mundo. Y si no lo haces, entonces todo ha terminado.

La vida no es justa. Te sacará de tu zona de comodidad, quieras o no. Entonces depende de usted cómo lidiar con eso. En lo que se refiere a la grandeza, llega cuando la dejas tú mismo, independientemente de que sea por valentía, curiosidad e incluso una simple locura.

No, no nos limitamos a donde estamos, sino a nuestro interior, que se cansa de seguir haciendo las cosas con regularidad, aunque nos fallan regularmente.

Si tiene control sobre su mente y se enfoca en sus metas, entonces nada puede limitarlo ni su mente ni las personas que lo rodean.

Usted vendrá encima de todo …

La mejor de las suertes !!

Porque nos encanta subestimarnos y conformarnos con lo fácil. Aquellos en los que intentas hacer las cosas en las que creen, por muy difícil que sean, alcanzan la grandeza.