¿Hasta qué punto tenemos control sobre nuestras mentes?

¿Por qué alguien diría que no tenemos ningún control sobre nuestras mentes?

La gente dice que somos ovejas, y luego estas mismas personas se burlan de los demás por comprar cosas que son demasiado caras, votar por políticos como Bush y Trump, y tomar bebidas como la cocaína como parte de su “dieta”.

Es cierto que nuestra mente subconsciente ejecuta la mayor parte del programa, y ​​también es cierto que podemos tomar decisiones para influir en nuestra mente subconsciente. Es NUESTRA mente después de todo.

Las personas que conducen un automóvil lo hacen principalmente de forma consciente al principio, y luego lo hacen casi inconscientemente después de un año.

Las personas que miran las noticias todo el tiempo pueden entrenar a su mente subconsciente para que crean que solo hay asesinatos, bombardeos y secuestros en la mente.

Las personas que miran muchas fuentes de información y medios diferentes pueden entrenar a su mente subconsciente para creer que sí, hay cosas negativas, y sí, solo nacen bebés todos los días, personas que se dicen unas a otras de las que las aman y personas que las dan. a otros por puro amor.

Ninguna. La mejor evidencia, sugiere fuertemente, que el subconsciente genera todos los nuevos pensamientos, decisiones y todo lo que jamás se haya imaginado. Lo que la gente llama voluntad consciente, se origina dentro del subconsciente.

El subconsciente es una máquina de procesamiento de datos. No tiene conciencia. No hay “mente”. Para lidiar con un mundo en constante cambio, debemos ser capaces de hacer predicciones para poder elegir. Para ello, el subconsciente ejecuta innumerables simulaciones, determina su resultado más probable y evalúa cada una, según la cantidad de su recompensa química (recompensas químicas del cerebro de Google), o el resultado negativo (miedo, dolor, vergüenza, humillación … etc.) .

Esto es para cada elección que hacemos. Algunos de estos resultados simulados alcanzan la conciencia. La gran mayoría no lo hacen.

Somos el subconsciente, y podemos aprender muchas cosas, incluyendo nuevas habilidades. Al mismo tiempo, el subconsciente está en constante conflicto consigo mismo: trabajo contra juego. Pasar vs guardar. A largo plazo vs objetivos a corto plazo. Vivir un estilo de vida saludable frente a ser un glotón perezoso.

La repetición entrena y acondiciona el cerebro, lo queramos o no.

Naturaleza humana: solo apreciamos nuestros logros ganados, nunca los fáciles.