Fui descartada por mi novia de un año, ella tiene un trastorno límite de personalidad. Tres semanas y sin contacto. ¿Trato y ayudo o me alejo?

¡Mi consejo para ti sería un poco de ambos!

Un año es mucho tiempo. Es probable que ambos hayan hecho una gran inversión emocional en este tiempo. Es admirable de tu parte entender que ella lucha contra una enfermedad mental y desea ayudarla y ser comprensiva. Si está preocupado por ella, sería apropiado buscar una vez más, de una manera no invasiva, como a través del correo electrónico o Facebook, y despedirse. Acepte que la relación ha terminado, pero hágale saber que puede acudir a usted si siente que necesita ayuda, por el amor que una vez compartió. Y luego, no la contactes de nuevo a menos que ella la inicie.

Aunque su corazón está en el lugar correcto, no tiene necesariamente ningún derecho legal para hacer que reciba tratamiento para su trastorno. Si ella es propensa a hacerse daño, puede ponerse en contacto con las autoridades o con su familia por su propia seguridad. Si este no es el caso, y ella no desea tener más contacto con usted, entonces mi consejo es que se vaya. Has hecho todo lo que podías hacer, y puedes seguir adelante con tu vida con la conciencia tranquila.

Le daría a conocer que está disponible para ella si decide buscarla, que usted la cuida, y luego dejarlo así. No la presionaría ni trataría de forzar su camino hacia su vida si ella decidiera cerrar esa puerta con firmeza. Por su bien, no puede dejarlo indefinidamente. Necesitas encontrar un cierre si se trata de eso y, en última instancia, hacer lo que sea mejor para ti.

Tenía un terapeuta que realmente me gustaba y respetaba. Pensé que ella era maravillosa. Sin embargo, ella no tenía experiencia con pacientes con BPD y (de manera apropiada) sugirió que me inscribiera en un programa ambulatorio intensivo. Incluso se ofreció a considerar seguir viéndome, pero quería referirme. Sonreí, le di las gracias, le dije que la vería la próxima semana, y que nunca volví a hablar ni a volver a verla. Me sentí abandonado, caído, y como una carga. No sabía cómo manejar eso, así que nunca lo hice. Lamento esa decisión. Obviamente, una relación paciente-terapeuta no se parece en nada a una relación comprometida entre socios, pero la mentalidad puede ser la misma. Puede que nunca te vuelva a decir una palabra. O bien, puede que algún día quiera abrir una comunicación con usted, resolver las cosas e intentar reconstruir lo que salió mal si está abierto a ello.

No importa el resultado, debes cuidarte. Ya sea que eso signifique cerrar las comunicaciones con ella y establecer límites difíciles, buscar asesoramiento para usted mismo, o resolverlo y convertirse en parte integral de su sistema de apoyo … tendrá que elegir la mejor opción para usted.