Escuchar música seria es ciertamente beneficioso. Una gran cantidad de investigación médica en los últimos 125 años parece apoyar esta opinión.
Pero desearía que fuera tan simple: todo lo que tienes que hacer es escuchar y convertirte en un artista creativo.
La creatividad es algo que tiene que ser alimentada y llevada a buen término, asumiendo que ya existe en ti. Inicialmente, no sabes si eres creatividad en algún grado. La mayoría de las personas cercanas a ti tampoco lo saben. La mayoría de nosotros exhibimos algún tipo de chispa, pero si se puede convertir en una conflagración en toda regla es una suposición descabellada en el mejor de los casos.
Mi creencia personal es que la creatividad comienza a desarrollarse cuando hay un catalizador presente. El catalizador podría ser una persona (padres, maestros, celebridades), un lugar (un museo, una sala de conciertos, una biblioteca), una obra de arte, una obra de literatura, una obra de ciencia.
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En la música, la escucha extensa y perceptiva es un torniquete importante para pasar. Estamos hablando de una escucha altamente concentrada, muy iluminada, con una partitura para ayudar a guiar, comprender, analizar y juzgar (tanto la interpretación como la composición).
Escuchar en sí mismo es una gran inversión de tiempo y esfuerzo.
A continuación, tenemos que definir el concepto de creatividad. La creatividad general podría ser solo sensibilidad al entorno, o podría ser una forma de ver la vida misma. La creatividad específica puede ser por escrito (ya sea en palabras o en sonidos), en pintura, en pensamiento abstracto, en ciencia, matemáticas, tecnología, arquitectura y en muchos otros esfuerzos.
Sabemos que la música se utiliza en la terapia médica para controlar (al menos en cierta medida) los trastornos neurológicos y psicológicos. Su efecto en cerebros muy jóvenes es probablemente observable tanto anatómicamente como funcionalmente. En los estudiantes universitarios, agudiza la concentración y la capacidad de pensar en varios niveles a la vez. En los adultos mayores, la actividad musical evita que los poderes mentales se descompongan prematuramente.
Si la escucha conduce a la creatividad es más un área gris en la investigación. Me atrevería a decir que una combinación de escuchar, tocar un instrumento y tratar de componer es más probable que desbloquee el talento latente.
Aún queda mucha investigación cuidadosamente planeada por hacer para entender lo que sucede.