Porque no te respetas a ti mismo.
Odio decírtelo, pero estás sufriendo de una mentalidad delirante que solo ve lo malo en las personas. Pasas por alto cualquier cosa que hace que alguien sea decente o interesante, y solo eliges centrarte en la mierda. Esto es autoengaño. Es una forma de pensar que solo reconoce lo que quiere ver (lo negativo) y desecha todo lo que no lo hace (lo positivo).
Odiar a las personas es a menudo una forma de auto-odio proyectada en el mundo. Tu vida no es lo suficientemente buena, no estás debidamente cumplida y te falta algo esencial para tu propia felicidad.
Debido a esto, te ves a ti mismo como un fracaso y sientes la necesidad de hacer que los demás bajen a tu “propio nivel”. Es mucho más fácil derribar a los demás que darles crédito donde es debido. Alguien que está fuera de forma, y que no se respeta a sí mismo por eso, va a odiar ver a alguien que lo está. Es mucho más fácil decir “Oh, ese tipo es un gilipollas” en lugar de “Él es donde quiero estar”.
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Odiamos sentirnos inadecuados, y las personas que tienen lo que queremos, o se han convertido en la persona que queremos ser, son vistas como un objetivo. Llaman la atención sobre nuestros propios defectos y, por lo tanto, los asociamos con cualquier sentimiento negativo que nos hagan sentir sobre nosotros mismos.
Solía pensar de la misma manera. Los chicos que eran más sexys que yo o tenían más chicas que yo o tenían mejores notas que yo o tenían más amigos que yo … los odiaba. No porque hubiera una razón legítima para odiarlos, sino porque mirarlos me hizo darme cuenta de todo lo que no era y me hizo sentir como una mierda.
No me respeté lo suficiente como para evitar jugar el juego de comparación del diablo, y odié a todos como resultado.
¿Quieres saber la solución?
Ámate a tí mismo. Supérate. Trabaja en las cosas que mejorarán tu vida, y pronto comenzarás a gustarte quién eres. Una vez que esto sucede, el odio desaparece. Una vez que empiezas a trabajar solo, ir al gimnasio, comenzar un pasatiempo o ser realmente bueno en una nueva habilidad, dejas de dar una cagada.
No hay lugar para el odio una vez que te gusta lo que ves en el espejo. El amor propio se extiende más allá de ti mismo, y te das cuenta de que todos somos seres humanos defectuosos que intentamos seguir nuestro camino.
Amate y respétate a ti mismo, y tu vida cambiará para siempre.