He pensado en esto durante años. Tengo una teoría multifacética. Una parte de mi teoría es que la frecuencia de las voces que escuchamos cuando éramos niños nos consoló, nos hizo sentir cálidos y seguros, nos motivó o nos hizo sentir temerosos o energizados, y está representada por las frecuencias en la música.
En otras palabras, el tono y la frecuencia de las notas en una guitarra coinciden con el tono y la frecuencia de la voz que escuchamos cuando era un bebé (o más joven, es decir, en el útero), por lo que nos sentimos bien (o mal). La octava en la que se reproduce la música coincide con las octavas de los sonidos que provocaron la emoción
También está el ritmo de la música que puede sincronizarse con nuestros propios biorritmos (latidos cardíacos, ciclos de sueño, etc.) que se sincronizan con los ritmos del universo (ciclos de órbita de los cuerpos celestes), etc. Es como si fuéramos un engranaje en una máquina más grande, y las consistencias matemáticas en la música hacen que los engranajes se muevan.
Las frecuencias, los ritmos, los tiempos, los niveles de hard y soft, y muchas más variables son todas simbólicas de nuestra propia experiencia personal del mundo. Intenta encontrar una canción que coincida con la velocidad de tu corazón … ¡tal vez eso te dé escalofríos!
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Estas son opiniones personales altamente especulativas. Gran pregunta