¡Lo mejor del mundo es la valoración y la satisfacción con ese orgullo para mí!
Hubo casos en los que me sentía mal debido a la presión académica. Mis padres no podían pagar mi matrícula continuamente, incluso durante mis tablas.
Recuerdo un incidente de décimo grado. La mayoría de los estudiantes tomaron clases de informática del Sr. X y podían programar con facilidad en el aula, mientras luchaba duro para no obtener errores. No me importó porque siempre traté de despejar mis dudas en la clase hasta que el Sr. X me regañó diciendo: “Eres el único estudiante que tiene problemas en cada pregunta “. Lloré.
Estaba molesto porque se suponía que el Sr. X debía resolver los problemas y no burlarse de mí. Yo era un estudiante por encima del promedio. Podía sentir que fallaría si no tomara clases. Lo hice, durante una semana. No pude entender nada de nuevo.
No voy a entrar en detalles. Odiaba al Sr. X. Todo lo que podía hacer era no importarme si el Sr. X existía. Obtuve un puntaje mejor que muchos, 90 puntos en Informática.
Después de mis resultados, nunca me volví y le di una sonrisa sarcástica a ese maestro cada vez que lo veía.
Poseo la actitud y el celo que me hacen sentir que no soy menos parejo cuando había habido muchas dificultades. Me siento orgulloso de mi mismo.
Muchas personas me llaman una persona jactanciosa. ¡¡Pero hay una gran diferencia entre jactarse de su riqueza y contar con su duro trabajo en la vida !!
El hecho de contar con tus habilidades y tu trabajo te hace sentir seguro de ti mismo.
Mi mejor amigo, Shipra, una vez me dijo: ” Smita, lo has hecho muy bien, incluso después de tantos problemas que ni siquiera podemos imaginar. Habrías hecho maravillas si te hubieran proporcionado todos los lujos y necesidades ” .
Llámame narcisista (pero no soy uno), pero me encanta la actitud que tengo porque me mantiene en movimiento.
Mi profesor de química dijo que fallaría la novena química estándar, obtuve la más alta. 94 marcos!
¡Cuanto más intentas romperme, más fuerte me pongo de pie!
He visto personas que se ríen de mí cuando digo que tampoco era mi primera bicicleta.
Crecí por la más pequeña de las cosas y no pude conseguirlo hasta que las compré yo mismo. Esas pequeñas cosas te dan una sensación de libertad.
Cuanto más difícil es la situación, más me esfuerzo. Y si el resultado es positivo, hombre! No puedo expresar el sentimiento.
Es un hecho que me he dado por vencido varias veces en mi vida porque, como soy humano, ¡siempre regresé como un Fénix!
¡A veces no se trata de gritar y demostrar a todo el mundo, a veces se trata del orgullo propio, la satisfacción personal y la autoestima!
PD: Nunca te rindas hasta que la vida se rinda de ti .. 🙂
-Smita