No tendemos a etiquetarnos y, en este sentido, los psicópatas no son diferentes a los demás. No se despiertan un día y tienen un momento eureka y deciden que es el día para no sentir empatía o dejar de ejercer su conciencia.
Hay muchos psicópatas, puede estar seguro de quién va a sus tumbas sin una pista, pero deja a sus hijos ilegítimos, socios devastados, rotos, enojo y desilusión. Algunas son personas normales que realizan sus vidas sabiendo que de alguna manera son diferentes pero que, sin embargo, se quedan atrás.
Es posible que se hayan mezclado silenciosamente en un vecindario suburbano, hayan logrado ingresar a una corporación, se hayan casado y, junto con su esposa o pareja, hayan criado hijos y los hayan enviado a la universidad.
Oímos hablar de los psicópatas que contribuyen a las tasas de delincuencia fuera de proporción con sus números. El asesino en serie ocasional es una mancha trágica en el paisaje que deja vidas destrozadas y horror indescriptible. Tal vez un día, en el futuro cercano, la ciencia propondrá un método para identificar y tratar a aquellos desafortunados individuos que nacen con genes malos y no es culpa de ellos mismos sentirse obligados a aprovechar su falta de conciencia para lastimar y explotar a otros.
- Cuando te sientes deprimido, ¿con quién hablas?
- ¿Por qué está mal el suicidio? ¿Por qué la gente pretende preocuparse? ¿Por qué la salud mental es racista?
- ¿Cuál es la importancia de la resistencia mental?
- ¿Cómo puede alguien hacer frente a los pensamientos pegajosos y el pensamiento excesivo?
- ¿Es BDSM un desorden?
Gracias por la solicitud.