De la misma manera que cualquiera se convierte en un maestro en cualquier cosa. 100% de dedicación, práctica diaria, estudio de la asignatura y todas las asignaturas adyacentes durante un período de unos 10 años.
En este caso (hablo como un espadachín novato, pero un artista marcial avanzado y un entrenador de performance), sospecho que implicaría:
- Fitness general diario
- Meditación diaria, yoga, tai chi, chi gong.
- Entrenamiento diario específico para espadachines.
- 3 a 4 veces combate semanal, trabajando para refinar tu oficio.
- Entrenamiento cruzado en otras artes, para mantener tu mente fresca y para mantener una actitud de principiante.
- Lecciones regulares de coaching, de alguien más experimentado. Siempre hay alguien de quien aprender.
- Una vida que está en equilibrio, porque ningún artista marcial que se respete a sí mismo toleraría nada más.
- Una filosofía de práctica personalmente perfeccionada, lo que significa que todo, incluso lavar los platos, se convierte en parte de su práctica.