Depende. Usted puede obtener una reacción muy tóxica entre ellos. Uno jugando fuera del otro. Uno hace algo que resulta entretenido para el otro y se alimenta de la reacción. Suben la apuesta, el segundo psicópata contribuye a su manera a rechazar al primero, y así sucesivamente. Podría convertirse en una situación muy negativa de tipo Ouroboros. Supongo que la misma reacción podría ser positiva, dependiendo de la situación. Dos jefes de organización van tras la misma cosa. Podrían formar un equipo y formular un plan cohesivo de beneficio mutuo que haga el trabajo bien y mejor que sin que se involucre en él.
O bien, podría hacer que se desagraden de inmediato. El dicho: “Hay algo en ese chico viejo que no me gusta de mí”. Nunca he estado en una situación en la que me encontré con uno y sentí que siempre podríamos confiar el uno en el otro, pero creo que nunca confiamos en nadie por completo. Sabemos de lo que somos capaces, y la confianza no se forma debido a las acciones de otro, tiene que ver con sus propias acciones. Usted sabe lo que haría, por lo que asume lo mismo de la otra persona. Es por eso que cuando alguien engaña se vuelven hipervigantes de su pareja. Saben que ellos mismos no son confiables, por lo que pierden esa confianza en su pareja.
Podría haber competencia, pero tendría que haber una razón para ello. No van a competir a menos que haya algo específico para perseguir. Incluso entonces habrá una evaluación en ambos lados si vale la pena su tiempo. ¿Por qué competir por algo que ninguno de nosotros es realmente lo que motivó la ganancia?
En general, podría haber muchas reacciones y podría ser bueno o malo. Sin embargo, es probable que sea divertido mientras dure.