¿Cuánto de nuestro instinto es una elección personal?

La respuesta simple es que ninguno de nuestros instintos es nuestra elección personal. Todos los humanos necesitan comida, agua y, en climas más inhóspitos, refugio para sobrevivir. El deseo de un compañero es uno que casi todos los humanos tienen, aunque no es necesario para la supervivencia.

Una vez que te metes en “reglas sociales” o “normas sociales”, las cosas se vuelven mucho más confusas. Freud argumentó que la sociedad perfecta sería una en la que no hubiera leyes, ni represión alguna, pero esa no es la sociedad en la que vivimos, ni tampoco es una en la que la mayoría de nosotros querríamos vivir.

Me parece recordar que alguien dijo que un precursor de Freud, Arthur Schopenhauer, dijo: “el hombre es algo que no debería haber sido” (aunque no puedo encontrar evidencia de la frase que se le atribuye después de una breve búsqueda en Google). Entiendo que los seres humanos son criaturas atrapadas entre dos mundos. El del instinto y el de la conciencia. Eso puede sonar deprimente, pero solo piense en el hecho de que incluso estamos discutiendo esto ahora. La capacidad de hablar, pensar y racionalizar es un gran regalo. Mejor pensar en nosotros mismos como un experimento de la madre naturaleza que algo “que no debería haber sido”.