En primer lugar, felicitaciones a usted por estar al tanto de esta falla y buscar asesoramiento. Este tipo de epifanías puede ser incómodo pero, en última instancia, conducirá a la mejor superación personal.
Sobre el consejo:
- Definir metas claras y específicas cada día. Por ejemplo, “Trabajo en entregable” no significa mucho. Sin embargo, “un objetivo mucho mejor es analizar y sintetizar el conjunto de datos de ventas regionales para definir hallazgos críticos y brechas para la sesión de resolución de problemas”.
- Descomponer cada objetivo en trozos factibles. La mayoría de nosotros sabemos lo que debemos hacer, pero no definimos cómo hacerlo. Una vez que perdemos de vista los pasos intermedios, nos desanimamos a comenzar la tarea en general. La mejor manera de combatir esta inercia es dividir su gran objetivo en elementos de acción más fáciles de digerir.
- Establecer fechas límite y atenerse a ellas. Sé honesto contigo mismo acerca de lo que tienes la capacidad de hacer. Una vez que te comprometas, quédate con él. El error común que cometen las personas es ser indulgente y dejarlo pasar “solo por esta vez”; antes de que te des cuenta, han renunciado a una serie de metas pequeñas para la próxima semana, lo que eventualmente lleva al próximo mes. Evita esto a toda costa y ejerce autodisciplina.
- Comunica tus metas con los demás. No necesitas anunciar tus planes al mundo. Sin embargo, sí ayuda hablar de tus metas con alguien. Una vez que haya compartido que está comprometido con un elemento de acción, ahora es responsable de ello, y su amigo está allí para controlarlo. Por lo tanto, mejor llegar a ella.
- Imagínate completando la acción. Lo más importante, comienza desde dentro. Imagínate haciendo cualquier meta que te hayas fijado. Imagine la configuración, sus acciones, la progresión y el estado final. Una vez que lo veas en tu cabeza, se vuelve mucho más fácil creer que puedes hacerlo, lo que te lleva a cumplir realmente con este objetivo. Nunca subestimes el poder de la psicología.