En mi propia experiencia, la creatividad (arte, no arte) comienza en el subconsciente: nuestras mentes conscientes no son más que las puntas de los icebergs.
El subconsciente es vasto, compuesto de sus propias profundidades complejas organizadas, generalmente tan insondables para la mente consciente como las corrientes en las profundidades más profundas de los océanos.
Los eventos secuenciales no ocurren aquí, pero los no lineales y sinérgicos sí lo hacen. Una vez más, nuestros pensamientos conscientes surgen de las profundidades sin conciencia. Esto descarta cualquier forma de secuencia en cualquier sentido tradicional.
La sinergia rige estas profundidades creativas, no la aleatoriedad. Los intereses, las observaciones y las emociones logran un grado integral de coherencia y, cuando están suficientemente gestados, emergen en la conciencia consciente.
- ¿Por qué los niños piensan que es divertido destruir los hormigueros?
- ¿Cómo puede una startup generar confianza y reputación con los primeros clientes y usuarios?
- ¿Hay cosas peores (hechas por humanos a otros humanos) que asesinar?
- Actuando: ¿Cómo es para los actores y actrices hacer escenas de la muerte o puede ser el amor haciendo escenas?
- ¿Qué aspecto de la psique masculina se representa a través de la película La Dolce Vita? Es decir, ¿etiqueta a todos los hombres como mujerizadores, oportunistas (Marcello, su padre, Paparazzo, etc.) o hay más de lo que parece?
Lo que emerge, para mí, son nociones casi completas, internamente coherentes y significativas: ser escritor, para mí esto significa un consorcio entretejido de trama, tema, personaje, escenario, voz y acción.
No es un proceso aleatorio, lo que no quiere decir que no haya casos en los que la aleatoriedad (o su personificación) parezca integral al arte, como en el movimiento Dada o las pinturas de Jackson Pollock. La aparente aleatoriedad en estas obras no es nada de eso. Aunque Pollock arrojó pintura al lienzo, no se le puede imitar fácilmente debido al marco creativo en el que realizó estos actos, al parecer, aleatorios.
Entonces: ni aleatoriedad ni secuencia formateada, sino una sinergia compleja que va más allá del acceso de nuestras mentes conscientes.