¿Qué debo hacer con mi miedo abrumador de hablar con alguien por teléfono? (No tengo ningún problema en hablar con las personas cara a cara)

Si se trata de una fobia que lo deshabilita, es posible que necesite ayuda profesional para encontrar la causa raíz del problema y solucionarlo.

Sin embargo, puedes probar algunas cosas por tu cuenta que no suponen una amenaza y ver si puedes disipar tu miedo al menos hasta cierto punto.

1. Llame a un número que tenga un contestador automático de voz, como su banco o una estación meteorológica. ‘Chatea’ con la voz como si fuera real. Invente respuestas serias y tontas a lo que dice la voz. Relájate sabiendo que no importa lo que digas en lo más mínimo.

2. Recluta a un buen amigo para que te llame. Contesta el teléfono solo con un ‘hola’. Organice de antemano con su amigo, que entiende su problema, que él conversará con usted durante dos minutos sin esperar ninguna respuesta de su parte. Al cabo de dos minutos tu amigo guardará silencio. Entonces puede sentirse libre de colgar sin decir nada, o tal vez solo “bien por”. Repita este ejercicio hasta que pueda hablar con una o dos oraciones a su amigo. Amplíe la longitud de sus respuestas cada vez.

3. Llama y pide pizza. Escriba su orden y léala palabra por palabra. La próxima semana (o pronto) ordene nuevamente sin escribirlo con anticipación. Continúe haciendo llamadas que requieran que sea breve y directo. Gradualmente haga llamadas más complicadas, como solicitar información sobre un producto que está a la venta.
Estas personas son extrañas para ti y probablemente nunca más hablarás con ellas. No habrá “consecuencias” para su conversación una vez que cuelgue.

4. Eventualmente llama a alguien que conoces solo para chatear. Hazlo breve pero amigable. Haga algunas preguntas pre-pensadas, como ‘¿cómo te fue el día?’ y luego responda de manera apropiada a sus respuestas como fluiría cualquier conversación normal.

Al aumentar gradualmente su participación en las conversaciones telefónicas, es posible que pueda encontrar el “lugar” donde las cosas se vuelven realmente agrias para usted y trabajar en eso hasta que se le pase, y luego pasar a una interacción telefónica más complicada.

Los teléfonos son espeluznantes. Hacen que las personas suenen como si estuvieran en un pozo.
Los teléfonos alámbricos están bien. Hay algo mal con los teléfonos inalámbricos.

Ahora … cómo explicárselo a la gente. Me siento estupido. Estoy atrapado en eso.