La mejor manera de hacerlo es entender por qué no los mantenemos en este momento.
Por ejemplo, puede haber varias razones y soluciones, respectivamente:
- Tienes miedo de fallar. Para enfrentarlo, solo piense en el peor resultado al que puede conducir el fracaso, y prepárese para aceptarlo. Es simple: solo imagina que no has hecho algunas cosas o que has hecho eso bastante mal, y alguien te dio la segunda oportunidad.
- No estás lo suficientemente motivado para hacer esas pequeñas cosas. Entonces, simplemente haga una lista de tareas pendientes, donde las cosas menos agradables sean las primeras, y las más atractivas de la lista.
- Tienes baja autoestima. La confianza es una habilidad más que un rasgo, así que solo piense en diferentes “ejercicios” que la impulsarán, como “hablar con 5 extraños” el lunes y “cantar su canción favorita en voz alta”. La aplicación Changer puede ayudar con eso también.
Entonces, es completamente bueno que entiendas tus debilidades, ¡solo atrévete a convertirlas en tus fortalezas!