Las mías son:
- Contando hasta cuatro. Ya sea cuántas veces hago tapping en un mostrador, o cuántas veces parpadeo en una fila, todo lo que hago que podría contarse es en cuatro o en cuatro (ocho, doce, dieciséis, etc.).
- Camino en un patrón específico, así que cuando me levanto empiezo con el pie derecho y cuando llego a mi destino termino con el izquierdo. Cualquier cambio en el material o el terreno sobre el que estoy caminando debe terminar también con mi pie izquierdo y comenzar con el derecho.
- El volumen de mi teléfono nunca puede subir solo una muesca, siempre tiene que ser conjuntos de dos.
- No soy un gran fanático en lo que respecta a mi espacio en casa, pero en la escuela todos los libros que tengo en mi escritorio deben estar en la esquina derecha, apilados de mayor a menor, y si no es así, me siento muy agitado.
- Tengo pensamientos intrusivos también. Entonces, si veo algo que me molesta (la mayoría de las veces es algo que tiene que ver con un tema desencadenante, como la autolesión), el pensamiento estará en la mente durante mucho tiempo después de que los tutores me gusten o no. No puedo controlar estos pensamientos y ocurren cuando menos los espero.
- Al caminar por la calle, tengo que tocar cada arbusto, poste de ladrillo o incluso la señal de la calle y, si no, debo volver a tocarlo. Si no vuelvo, me siento extremadamente molesto por ello y la única forma de solucionar este sentimiento es tocar la muñeca 40 veces.
Sinceramente, creo que estoy dejando de lado algunos ya que hay muchos, pero estos son los principales que ocurren con mayor frecuencia en mi vida cotidiana.