Respuesta corta: en las opciones presentadas visualmente, la primera opción se selecciona con mayor frecuencia (es decir, el efecto de primacía). En las opciones presentadas oralmente, la última opción se selecciona con más frecuencia (es decir, el efecto de actualidad).
En un mundo perfecto, los encuestados brindan toda su atención y utilizan todos los recursos cognitivos disponibles (es decir, el razonamiento y la memoria) para responder a las preguntas presentadas. Desafortunadamente, no vivimos en un mundo perfecto y los encuestados a menudo nos satisfacen cuando responden encuestas (http://psweb.sbs.ohio-state.edu/…). Cuanto más complicada y poco interesante sea la encuesta, menos motivado estará un participante para aprovechar todas sus capacidades cognitivas.
En términos de orden de respuesta (el término técnico para lo que se solicitó), se ha encontrado lo siguiente (http://comm.stanford.edu/faculty…
1) Cuando se presenta visualmente, la primera opción crea un efecto de marco o estándar de comparación donde todas las últimas opciones se juzgan en su contra. Además, la fatiga cognitiva del encuestado crece con cada opción subsiguiente considerada. Debido a la cantidad relativamente mayor de consideración dada la primera opción, los encuestados que están satisfechos tienden a preferirla.
- ¿Puede la gestión del riesgo superar los sesgos cognitivos?
- ¿Cuáles son algunos buenos ejemplos de un sesgo de confirmación?
- ¿Cuáles son algunas creencias ampliamente sostenidas por los indios que son ilógicos o incorrectos?
- Escepticismo: ¿Algún experto en sesgo cognitivo habla de una desventaja de este conocimiento?
- Sesgo cognitivo: ¿Cuáles son algunas explicaciones neurológicas de “Precios psicológicos”? (Ver la descripción)
2) Cuando se presenta oralmente, no hay tiempo suficiente para desarrollar estos sesgos cognitivos para la primera opción. Los encuestados que están satisfechos también pueden olvidar las opciones anteriores presentadas oralmente. En estos escenarios, es la última opción que se destaca más en la mente del encuestado y se le da más consideración y, por lo tanto, se prefiere.
Otros estudios que confirman estos resultados:
– Estudio de boletas electorales y orden de presentación (http://www.jstor.org/pss/2749662)
– Estudio de encuestas telefónicas (http://poq.oxfordjournals.org/co…)